Al ver a su hijo sentado frente a la computadora con una mirada sombría, cada vez que entraba a la habitación lo veía apagarla. Demasiado curiosa, de repente encendía la computadora y se sorprendía al verlo viendo películas para adultos. Estaba muy asustado y tímido pensando que su madre lo regañaría, pero no, en cambio ella continuó mirándolo e hizo acciones que lo sorprendieron aún más después. Las escenas calientes de la película son los estimulantes que la ponen cachonda rápidamente y ahora tiene que depender de su propio hijo para satisfacer la sed ardiente en su cuerpo.